“El arte sirve para poetizar la realidad”

Junto a otros artistas locales, Juan Téllez pintó murales en la ciudad. Quedaron retratados Ángel Di María, Lionel Messi, Dibu Martínez y Diego Maradona. "Me gustaría hacer un Messi grande", dice.

Juan Tellez es artista plástico y docente en el ámbito universitario y comunitario de La Plata. Oriundo de Olavarría, junto a otros artistas, ha dejado su huella en murales. Cualquiera que camine la ciudad de Olavarría los ha visto.

El mural del Dibu Martínez sobre la calle Vélez Sarsfield, el de Di María en la Lavalle, el de Messi en el Barrio San Vicente y el de Diego en Barrio Jardín tienen algo en común: fueron gestados por Juan Tellez, que fue sumando gente para poder plasmarlos.

Juan se toma un rato para charlar con Verte pero no deja de pintar mientras lo hace, y explica: “los martes es mi día libre, no doy clase. Soy profesor de escultura y doy clases en la Facultad de Arte y en el Club de la Pintura”. Cuenta que ese club surgió por una necesidad de tener un taller, sumaron socios y dan clases de pintura para adultos. También da clases en un espacio comunitario para las infancias más postergadas, y quizás no tendrían otro espacio para expresarse.

¿Cómo surgieron las propuestas de los jugadores de la Selección campeona? “Por impulso de los vecinos algunos, pedidos más personales otros. Primero me pidieron un Messi en papel en acrílico y después lo hicimos en mural en la casa de mi primo”, cuenta.

Dice que “el mural es la palabra del pueblo, en Olavarría estaría bueno que haya más murales, que la ciudad dialogue con esas imágenes y las diferentes posiciones artísticas”. Recupera en la charla las imágenes plasmadas bajo el nombre de “Tapalqué Monster”, realizadas por Fernando Durante en paredes de distintos sectores de la ciudad y que recrean a criaturas acuáticas que bien podrían habitar el arroyo.

¿Cómo es el proceso que termina en la confección del mural? “Se van haciendo bocetos, es mejor en digital, vas trabajando e intercambiando los colores y ahí avanzas”, dice Juan y lo explica así, simple, como queriendo transmitir que es algo simple de hacer. Sin embargo aclara: "es un laburo muy exigente, estaría bueno que se valorara a nivel monetario”.

“Quiero recalcar la función del arte, quisiera hacer un Messi grande, tengo ganas de que la ciudad esté llena de murales, pero bueno, no hay plata, para cultura no hay plata, para los artistas no hay plata, hay poco dinero en general para la producción de obras”, lamenta.

“Creo que en Azul le dan más atención al arte en el espacio público, el arte público puede cambiar tu cotidianidad, se ve en la construcción de monumentos, por ejemplo, pero también en los murales. Nos encontramos en el Dibu, imaginate decir así”, lanza Juan.

“Mi idea es generar, creo que no podría haber hecho otra cosa, tengo una mirada bastante amplia, creo que el arte sirve para poetizar la realidad. Y sobre los murales puntualmente, lo más importante es lo comunitario, la imagen que queda sí, pero lo más importante es esa reunión que se generó para gestarlo”, explica.

“Hago murales y pinturas a pedido, hace algunos años que pinto y durante la pandemia, me animé y me puse a pensar ¿y si me encargan? Me va bastante bien, la gente es re buena onda, me aguanta y me piden un montón. Hace algunos años, decidí solo hacer lo que me gusta, relegar otro tipo de bienestar por este tipo de bienestar. También estoy haciendo una escultura de yeso que se llama La Santa Evita, la he vendido mucho, la hice a partir de un molde de silicona".

“Me formé para ser docente pero es difícil entrar en el sistema educativo, hay muchos docentes, te cansas de ir a actos públicos y no quedar. Doy clases en el FINEs pero me gustaría entrar al sistema formal”, repasa.

“En diciembre expondré en el Museo Dámaso Arce, es sobre la adolescencia de una generación que nos dejó lo que yo llamo “reliquias rollingas”, anuncia Juan. Téllez ya expuso en la ciudad, en el marco de la Semana de la Memoria, montó una obra colaborativa a partir de objetos personales y su relación con la memoria. “La memoria de las cosas” convocaba a escribir sobre esas materialidades que tienen la potencia de despertarnos de un sueño, el sueño de la vida.