Crece la tenencia de mascotas no convencionales en los hogares

Además de gatos y perros, las personas optan por tener animales silvestres. Agustín Romero, veterinario local, explicó cuáles son los puntos a tener en cuenta a la hora de hacerlo.

Las mascotas se encuentran en casi todos los hogares, en mayor o menor medida, no hay personas que no hayan tenido al menos un animal a cargo. No distinguen clases sociales, países ni religión.

Son esos compañeros que esperan con ansias la hora del paseo, que sus dueños lleguen del trabajo y les encanta jugar. Hay de todos los colores y tamaños. Las más comunes son los perros, gatos y conejos, pero en algunos casos, hay personas que tienen como mascotas a otro tipo de animales, fuera de lo común, como tortugas, cabras, reptiles, serpientes y arañas.

Si bien esto representa un atractivo para las visitas, y son motivo de alguna anécdota curiosa, la realidad es que en la mayoría de los casos no reciben el trato adecuado por parte de sus dueños. Esto se debe a falta de información, creencias populares que son erróneas o simplemente por negligencia.

“Lo primero que tiene que entender la gente es que los animales no son un juguete para ellos o el nene “explicó a Verte Agustín Romero, veterinario local, que además de atender a perros y gatos, trata a mascotas menos tradicionales. Además, agregó que “conllevan otro gasto económico y requieren de otros cuidados a los que hay que estar dispuestos”.

No todos los animales pueden domesticarse, por lo que a la hora de elegir uno, debe tenerse en cuenta este aspecto, así como disponer de un lugar adecuado en el que pueda adaptarse y no le genere problemas a futuro. Su cuidado demanda mucha exigencia.

Romero indicó que hay animales que están protegidos por la ley, y en su mayoría son los que se encuentran en peligro de extinción, como las tortugas terrestres y los loros hablantes. “Se prohibieron hace poco y hay personas que hace muchos años que los tienen, por ese motivo si se acercan, se los atiende igual, porque la salud del animal está primero”, comentó

Otro punto fundamental es informarse correctamente acerca de la alimentación requerida por cada especie; ya que un conejo, además de comer zanahoria, necesita de otras semillas y vegetales para obtener todos los nutrientes necesarios “algo que muchos desconocen, y hace que el animal no se desarrolle de la mejor manera y sea propenso a enfermarse”, sostuvo el veterinario.

En esta línea, el médico de animales aclaró que “el hábitat también es fundamental. Por ejemplo, las iguanas, necesitan de un clima tropical, por lo que para tenerlas en el hogar, es necesario comprar focos especiales que irradian el calor y el tipo de luz que ellas precisan”.

Algo que suele suceder con estas mascotas poco convencionales, es que cuando llegan a la adultez, por diferentes motivos, como lo puede ser su tamaño, comportamiento o exigencias en el cuidado, terminan siendo abandonados por sus dueños.

Esto puede generar diversos problemas, no solo para el animal, sino para el ecosistema, ya que existe la posibilidad de que afecte la biodiversidad natural. “Al soltarse en la naturaleza, en un bioma que no es el suyo y no cuenta con un depredador natural, puede hacer que se vuelva una plaga”, contó Romero.

Y en el caso contrario, devolver al animal a su hábitat natural tampoco es la solución, porque “lleva consigo bacterias que no están en la naturaleza, y puede desatar una muerte de muchos ejemplares de la especie que no están adaptados a esa enfermedad”.

Uno de los más comunes, y que recae sobre la mascota abandonada, es que al vivir toda su vida como animal doméstico y en cautiverio, no sepa adaptarse a una vida salvaje, como conseguir alimento por cuenta propia, y producto de esto, muera rápidamente.

El tráfico ilegal es otra de las grandes problemáticas que rodean a esta práctica, principalmente por las especies en peligro de extinción. Un mercado que mueve millones de dólares con su venta, mediante criaderos ilegales.

Sobre este punto, alertó a quienes están buscando hacerse con una mascota de este estilo, y resaltó la importancia de asesorarse de manera correcta, porque “hay muchos casos de gente que busca “mini pigs”, que son chanchitos que no pesan más de 10 kilos de adultos, y les venden lechoncitos que de grande llegan a pesar 200 kilos y no saben qué hacer”.

“Antes de hacer cualquier movimiento, lo fundamental es la información, saber que requerimientos necesita el animal, y saber si se los vas a poder brindar o no”, sentenció.