01-11-2023
El cáncer de piel es una enfermedad que ha ganado terreno en los últimos años. La dermatóloga Milagros Loos habló sobre los cuidados, el grupo más vulnerable y cómo hacer un chequeo casero.
La llegada de los días soleados y de altas temperaturas propician que las personas salgan de sus hogares con más regularidad que en los fríos días de invierno, por ende, el tiempo de exposición al sol aumenta de forma considerable, pero en la mayoría de los casos, no lo hace el cuidado de la piel.
La Radiación Ultravioleta (UV) proveniente de los rayos del sol, a medida que aumenta el tiempo, provoca que se generen daños por quemaduras en la piel que dañen el ADN de las células, provocando que comiencen a crecer sin control y puedan generarse lesiones cancerígenas.
El melanoma, si bien no es el único tipo de cáncer de piel, es el más agresivo y el que más rápido puede expandirse hacía otras partes del cuerpo. Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) en el año 2020 se detectaron más de 1,5 millones de casos de cáncer de piel y se superaron las 100.000 muertes.
Milagros Loos, dermatóloga de la Ciudad, explicó a este medio cuáles son los cuidados a tener en cuenta para evitar la aparición de este tipo de cáncer, cómo identificarlo y qué otras problemáticas puede acarrear una exposición prolongada al sol sin ningún tipo de protección.
Los cuidados para prevenir la aparición de este tipo de enfermedades, en general, tienen la particularidad de que no requieren de un esfuerzo muy grande sino “que son cotidianos como usar protector solar durante todo el año, haya sol o esté nublado, remeras y gorros con protección UV” indicó Loos.
También es muy importante evitar el contacto con el sol en el horario de 10 a 16, que es cuando más daño hace. “En la playa y la pileta es fundamental” ya que el agua y la arena funcionan de reflector de los rayos solares. Además, el protector debe aplicarse media hora antes de la exposición y renovarlo cada dos. “Siempre de factor 30 para arriba y el ideal es 50. Menos de eso no es aconsejable” comentó la dermatóloga.
Sobre las personas que toman sol para lucir bronceadas, la profesional explicó que “no está recomendado y que lo ideal es siempre usar protector, porque a diferencia de lo que la gente piensa, te bronceas igual y evitas las lesiones malignas”.
El Melanoma
Sobre este tipo de cáncer de piel, Loos expresó que “no es el más frecuente, pero sí el más severo”. Por otra parte, enfatizó en que esta enfermedad no es producto de una sola quemadura solar o de un momento, sino que es el resultado de “la exposición al sol acumulada de toda la vida”.
En este sentido, sostuvo que las quemaduras solares con enrojecimiento y/o ampollas, sobre todo en los chicos, son las peores porque “predispone a la persona a poder tener cáncer de piel en un futuro”.
Según sus palabras lo ideal es acudir a un especialista al menos una vez al año para llevar un control de los lunares y su evolución, pero también hay una manera casera de identificar si un lunar tiene características que corresponden a un posible melanoma y corresponde a la regla “ABCDE”. Cada letra representa un punto a tener en cuenta:
A: Representa la asimetría. Busca lunares con forma irregular, como dos mitades que tienen un aspecto muy diferente.
B: Representa el borde irregular. Busca lunares con bordes irregulares, cortes u ondas, características de los melanomas.
C: Representa los cambios de color. Busca crecimientos que tengan muchos colores o una distribución desigual de estos.
D: Representa el diámetro. Busca nuevos crecimientos en lunares que tengan más de 6 milímetros.
E: Representa la evolución. Busca cambios en el tiempo, como un lunar que crece de tamaño o que cambia de color o de forma. Los lunares también pueden evolucionar para desarrollar nuevos signos y síntomas, como picazón o sangrado.
Por otra parte, también “hay que estar atento a varios síntomas que pueden aparecer como picazón, dolor, una lesión que no cicatrice o sea anormal. En ese momento hay que ir a un dermatólogo” sentenció.
Sobre las personas más afectadas, indicó que si bien afecta a personas de cualquier edad, el riesgo es mayor en la población con piel clara, mayores de 50 años y de sexo masculino.
Por último, destacó la mayor concientización y promoción de la salud que ha surgido en los últimos años, con controles en lugares públicos y playas, sobre todo entre adolescentes.