Estadísticas y reflexiones a tres años de la ley que permite la interrupción voluntaria del embarazo

Desde que se aprobó la norma 27.610 el número de abortos en Olavarría ha ido “in crescendo. El análisis de Griselda Astudillo, integrante del equipo técnico del PMSSyR.

En la Argentina todas las personas en capacidad de gestar tienen derecho a la interrupción voluntaria del embarazo (IVE) por la Ley 27.610 sancionada en diciembre de 2020 hasta la semana 14 de gestación, sin la necesidad de explicitar los motivos de su decisión.

La Ley reconoce a partir de la semana 15 también el derecho a la interrupción legal del embarazo (ILE) si es consecuencia de violencia sexual o hay un peligro para la salud integral o la vida de la persona gestante.

La Interrupción Voluntaria del Embarazo fue convertida en ley por el Senado argentino el 30 de diciembre de 2020 con el voto favorable de 39 parlamentarios y el rechazo de otros 29.

A partir de la promulgación de la Ley 27.610 es que existen datos sobre la evolución estadística de los “acompañamientos” que se realizaron en el partido de Olavarría, como identifica al procedimiento.

En 2021 en Olavarría se realizaron 230 acompañamientos por ILE/IVE; en 2022 la cifra creció hasta 295 acompañamientos y en 2023 se hicieron 320 interrupciones legales o voluntarias del embarazo (ILE/IVE) en el sistema de salud local.

“Fueron creciendo las interrupciones porque la ley legitima, entonces las personas se empiezan a acercar más y se empieza a difundir también que desde este espacio se las acompaña”. Griselda Astudillo es integrante del equipo técnico del Programa Municipal de Salud Sexual y Reproductiva, anclado en la secretaría de Salud por ordenanza municipal, cuya coordinadora es Yanina Bórmida.

El acompañamiento

La palabra “acompañamiento” para definir el acto tiene una explicación: “Por el programa municipal se acompañan todas las interrupciones tanto legales como voluntarias del partido de Olavarría”.

“Desde que la persona ingresa al circuito y el Programa toma conocimiento de que quiere interrumpir el embarazo se hacen una serie de pasos que siempre son con una asistencia personalizada por parte de las integrantes del equipo, de las médicas del equipo y de las médicas que prescriben la medicación” verificó.

“El proceso termina con la provisión de un método anticonceptivo por parte del sistema público de salud para la persona que lo solicita” añadió Griselda.

“A veces hay personas que se acercan a la consulta porque requieren una interrupción diciendo que cuando se promulgó la ley no estaban muy a favor, pero se encontraron con una situación que lo requería y ahí las recibe un equipo con un acompañamiento amoroso, respetuoso, confidencial, que lo que hace es estar al lado de la decisión que toma esa persona” sumó.

“Las consejerías que nosotras hacemos a través del Programa Municipal de Salud Sexual y Reproductiva tienen un abordaje integral y se pone a la persona en el centro de atención y se le da información clara para la decisión que va a tomar” manifestó Griselda.

“Esto se contrapone con el modelo médico hegemónico, donde a veces el paciente es un objeto al que se le dice lo que tiene que hacer y no se toma en cuenta su contexto ni su situación” dijo.

También se refirió a la “objeción de conciencia” de los profesionales de la salud: “Por supuesto que dentro de un equipo de trabajo las tensiones existen por la temática de aborto, por lo que ha implicado socialmente como algo sesgado, oculto y las personas que necesitaban hacerlos por lo que sean eran sometidas a situaciones donde corría riesgo su salud”.

Griselda mencionó que a veces tal persona llega con dudas al Programa y una vez recibido el asesoramiento correspondiente decide continuar con el embarazo.

“En cualquiera de las dos opciones se las acompaña. Si decide continuar esa gestación se dan todas las informaciones de los controles necesarios para que sea un embarazo cuidado. Acompañamiento es, valga la redundancia, acompañar las decisiones de las personas con información clara, corriendo el velo de los fantasmas que hay sobre el aborto” indicó.

Aclaró que “el aborto voluntario es un abordaje farmacológico, medicamentoso. Es un procedimiento de bajo riesgo, recomendado por la Organización Mundial de la Salud, que se realiza de manera ambulatoria. La persona lo realiza en su casa, a lado de su familia, amigos y amigas que acompañan esa decisión y por el Sistema Público de Salud”.

Si la persona lo requiere también se realiza el asesoramiento con posterioridad a la interrupción del embarazo. “Casi nunca hemos recibido pedidos de acompañamiento porque a la persona que toma una decisión se la acompaña, se cuida su salud y cuando termina el proceso se siente muy segura de la decisión que ha tomado” marcó.

“Es una persona que si no existiera la ley igual lo haría y sería de una manera que no esté cuidada. A veces la salud queda mucho más afectada por un embarazo no deseado o que no se puede interrumpir” advirtió.

El Programa de Salud Pública Municipal, hizo hincapié, garantiza la interrupción de embarazo para todas las personas del Partido, tengan o no tengan obra social.

“Es importante resaltar que el Programa Municipal de Salud Sexual se creó por ordenanza en el año 2010 por varias cuestiones. Primero porque cuando se aprobó la ley nacional en 2002 se empezaron a realizar monitoreos en articulación con universidades y acá la Unicen y su Programa Permanente de Estudios de la Mujer realizó ese monitoreo” planteó Griselda.

“Una de las acciones que salieron de esos monitoreos fue la ordenanza municipal, que se creó en 2010, pero pasaron muchos años hasta que efectivamente se concretó el Programa, en 2016. En ese momento se decía Salud Sexual y Procreación Responsable y con el tiempo pasó a llamarse Salud Sexual y Reproductiva por una cuestión de perspectiva” recordó.

En aquel momento se acompañaban interrupciones legales, con bastante resistencia incluso de parte de los equipos de salud y miradas también más prejuiciosas sobre el tema.

“Lo que hizo mucha fuerza para hablar del tema en ese momento, basándose en el artículo 21 del Código Penal de nuestro país -que es muy viejo- fueron los movimientos de mujeres y feministas que empezaron a acompañar situaciones de personas que tenían riesgo para su salud y no se les daba acceso a una interrupción del embarazo” analizó.

Griselda hizo un poco de historia aludiendo a una gran cantidad de proyectos de ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE) que terminaron cajoneados por perder estado parlamentario, hasta la promulgación de la legislación de 2020.

Finalmente las presentaciones sistemáticas de la Campaña Nacional por el Aborto Legal, Seguro y Gratuito llegaron a aquella histórica noche del 30 de diciembre de 2020 cuando la ley fue aprobada.