11-02-2024
Jorge Padín, delegado local de UTA, explicó que las medidas del Gobierno Nacional provocarán un nuevo incremento en el servicio.
El pasado jueves el Gobierno nacional anunció, a través del Ministerio de Economía, que eliminará el Fondo Compensador, que subsidia el valor del boleto en el interior, y que los subsidios a las empresas que prestan el servicio del transporte público de pasajeros se reducirán en un gran porcentaje.
Esta decisión generó una repercusión inmediata en distintas ciudades del país, ya que intendentes y representantes de la Cámara de Transporte y las empresas prestadoras señalaron que los costos del servicio podrían elevarse hasta un 300%.
En Olavarría el último aumento del servicio de transporte urbano e interurbano se produjo el 18 de enero de este año, a través de un decreto y rondó el 91% en promedio.
Este incremento ubicó a la Ciudad en el puesto Nº 32 en el ranking de las tarifas de Transporte Automotor Urbano de Pasajeros a nivel nacional, con un precio de $261. En el primer puesto se encuentra la ciudad de Formosa, donde el boleto mínimo tiene un valor de $690.
Jorge Padín, delegado del sindicato de Unión Tranviarios Automotor (UTA) en Olavarría dialogó con Verte y dijo que “el impacto de esta medida va a ser muy grande acá porque el transporte se mantiene con ese subsidio prácticamente” y anticipó que en las próximas semanas, de no encontrar una solución o marcha atrás con la eliminación del subsidio, podría haber nuevos incrementos.
En esta línea, recordó la reunión antes del último aumento en la cual las empresas pedían un promedio de 140%, y que finalmente superó por poco el 90%. “Esto fue hace poco y antes de esta medida, asique la semana que viene va a ser muy movida y de ahí se evaluará un porcentaje, que será de más de tres dígitos seguramente”, indicó.
En ciudades cómo Tandil, donde especulan que el boleto rondará los $600, entre otras medidas para reducir costos, probarán colectivos que funcionan a GNC.
El delegado remarcó que las principales problemáticas de esta decisión por parte del Gobierno Nacional impactan directamente “en el bolsillo de la gente y el puesto de todos los compañeros de trabajo”.
“Este aumento pega fuerte a los estudiantes y trabajadores, que en muchos casos, no van a poder pagarlo”, señaló.
Se refirió a que, luego de los aumentos, “hay que ver cómo afectan a la cantidad de personas que viajan porque cada vez necesitan más plata por mes y hace que ya no lo usen”.
Diferenció el transporte urbano del interurbano por las distintas características de sus usuarios, por las distancias que recorren. “Para las personas que vienen de las localidades sigue siendo barato, pero el problema es que llega el aumento de la tarifa y no lo acompaña un incremento en los ingresos de la gente”, explicó.
Sobre el urbano, comentó que es el más afectado porque los usuarios, dentro del casco urbano, pueden reemplazar el uso del transporte público por la bicicleta o caminar, modificando su forma de movilización hacia una más económica.
De este modo, sostuvo que podrían peligrar muchos puestos laborales porque “aumenta el combustible, hay paritarias, baja la cantidad de pasajeros y los números no dan, por lo que creemos que puede haber reducciones o directamente desaparecer el servicio urbano en muchas ciudades”.
Si bien aún no hay precisiones sobre las próximas medidas por parte del sindicato, las empresas y el Municipio, Padín expresó que “la otra semana seguro va a haber reuniones y novedades, pero va a impactar y yo creo que bastante fuerte”.
“En las ciudades más chicas es donde más va a impactar, tanto que puede llegar a desaparecer el transporte urbano porque la gente va a buscar otros modos de trasladarse”, finalizó.