Motos y contaminación acústica, una problemática con historia

Las quejas y denuncias por los vehículos con caño de escape libre o modificado continúan en aumento. “Es algo que pasa en toda la Ciudad, a cualquier hora”, relataron vecinos a Verte.

La contaminación acústica es una problemática que comenzó a discutirse hace largo tiempo en Olavarría y otras ciudades del país. Bares, boliches bailables y vehículos son los principales apuntados de incumplir la Ordenanza 3978/16 que rige desde hace ocho años en el Partido.

En el último tiempo uno de los mayores protagonistas de los posteos y quejas en redes sociales han sido las motocicletas con escape libre, una modificación que genera ruidos aún más altos de lo normal en este tipo de vehículos.

“¿Hasta cuándo vamos a soportar los escapes ruidosos y los cortes de las motos?”, “cada vez son más los que tiran cortes todo el día” y “parece que se organizan en banda para andar con las motos haciendo ruido por todos lados”, son algunos de los mensajes que pueden leerse en las redes.

Vecinos y vecinas de la localidad dialogaron con Verte acerca de esta situación y los problemas que generan las motocicletas. “Las molestias que ocasionan es que no te dejan descansar, no podés estar en tu casa con las ventanas abiertas porque el ruido es tremendo”, contó Gustavo y agregó que “los que más lo sufren son las personas autistas y animales, son víctimas de estas conductas”.

En este punto, el vecino indicó que las zonas donde suelen circular con más frecuencia son en la Avenida Colón entre Avenida. Pringles y Rivadavia, Microcentro y el Centro Cultural San José. “En la tarde y a la madrugada son los peores momentos, y cuando van al Centro Cultural se ponen a hacer ‘wheelie’ y correr picadas”, arremetió.

“Se escuchan a toda hora, sin importar día y horario” comentó Valeria, otra vecina de la comunidad que está “cansada” de este tipo de vehículos que “con las explosiones a la madrugada te hacen sobresaltar”.

A pesar de la Ordenanza 3978/16, que se encuentra vigente desde el año 2016 y sanciona con multas y hasta clausuras a cualquier evento que supere los 90 decibeles, Gustavo sostuvo que “nunca vi que los parara la Policía o Control Urbano y los multara”.

“Deberían prohibir cualquier moto que tenga escape libre, afectan a los niños con TEA que son sensibles a todos los estímulos, incluido el ruido, generando más estrés y ansiedad”, manifestó Valeria al ser consultada sobre cómo se debería proceder con este tipo de vehículos modificados.

Lo cierto es que en Olavarría hay antecedentes de infracciones labradas a vehículos por ‘ruidos molestos’. En mayo de 2023 se retuvieron 5 ciclomotores por esta infracción, además de no contar con la documentación habilitante para circular.

Experiencias de otros Municipios

Olavarría no es la única ciudad en la que los habitantes se manifiestan en contra de este tipo de ruidos, sino que está situación se repite en cientos de otras localidades de la Provincia y el país.

Debido a esta problemática, en ciudades vecinas como Azul y Tres Arroyos los intendentes, en febrero de 2023, tomaron la decisión de destruir caños de escapes libres que fueron secuestrados en operativos por ruidos molestos.

Otros casos que han tenido relevancia han sido los de ciudades como General Cabrera, en la provincia de Córdoba, donde a principios de este 2024 compactaron más de 40 caños de escapes. En el Municipio de Luján, en el marco de una campaña llamada “Avanzá sin Ruido” en noviembre del año pasado compactaron 127 unidades secuestradas en distintos operativos.

Esta es una iniciativa que cada vez toma más fuerza y es replicada en más municipios a lo largo y ancho del país para combatir la problemática de la contaminación sonora producto de los caños de escapes modificados.