Cuando sentarse en el inodoro pasa a ser un trauma

El doctor José Ignacio Cueli, gastroenterólogo, hizo un valioso aporte sobre la siempre molesta constipación. Causas, tratamiento, cuándo alarmarse y cuándo no.

La constipación es una causa frecuente de consulta médica y afecta a un porcentaje importante de la población. Incómoda por sí misma, también puede resultar perturbadora por sus efectos colaterales, tanto físicos, psicológicos y como alarma de alguna afección mucho más grave.

Esta patología es capaz de convertir el simple y natural hecho de sentarse váter en un episodio incómodo, traumático y hasta indeseado.

El doctor José Ignacio Cueli, gastroenterólogo olavarriense originario de Trenque Lauquen, se refirió a una problemática que a menudo recibe en su consultorio.

Definió la constipación como “la sensación de evacuación no satisfactoria, ya sea por tránsito lento o porque no se puede expulsar la materia fecal. Cuando ir al baño se convierte en un problema, ahí es cuando consulta la gente”.

La evacuación, alertó, es una cuestión muy subjetiva: “Hay gente que evacúa cada dos o tres días y no lo siente como algo que le cuesta y hay gente que sí”.

“Si bien hay criterios diagnósticos que se deben cumplir con respecto a las heces duras, redondeadas, pequeñas, utilización de maniobras para evacuar también, tiene que ver con la sensación insatisfactoria” añadió el doctor Cueli.

La frecuencia de evacuación no es un dato matemático. “Normalmente cada 48/72 horas una persona tiene que evacuar y si pasa ese tiempo puede sentir disconfort o dolor abdominal. Hay gente que pasa más días y no tiene ese problema” manifestó.

“Si pasan los días y no hay una alarma no es para preocupar. Lo que sí tiene que haber es un examen físico si se empieza a distender el abdomen y se hincha. Ahí obviamente que sí hay un problema y hay que apelar a un tratamiento medio rápido” corrigió.

“Si el paciente va al baño cada 5 días y toda la vida fue así, existe un problema de constipación, pero no hay una gravedad en el caso” agregó.

La constipación es un evento multicausal. “Hay cuestiones constitucionales, como que en las mujeres es mucho más frecuente; a mayor edad es más común; tiene que ver obviamente la dieta, el sedentarismo, cuestiones genéticas o familiares” explicó.

“Es un combo” graficó el profesional. “También hay que descartar enfermedades o medicaciones que favorecen la constipación, como el Parkinson, diabetes, hipotiroidismo. Patología en las que uno puede hacer algo y mejorar. Lo mismo, las medicaciones derivadas de la morfina favorecen la constipación” dijo.

El doctor Cueli hizo un apartado a la situación de las mujeres. “La proporción es 3 a 1 con respecto a los hombres y más común en mujeres mayores” reveló.

La constipación es un mal en sí mismo y tiene efectos asociados. “Es un síntoma molesto que trae aparejado un problema psicológico, cuando para ciertas personas la vida se torna alrededor del baño o de la necesidad de evacuar o no” planteó.

“La constipación en sí por lo general no presenta complejidades desde el punto de vista clínico o consecuencias graves para la vida en lo orgánico, pero sí en la parte emocional y psicológica en cierta gente al no poder evacuar” indicó el doctor Cueli.

Sin embargo, advirtió que un médico ante pacientes con constipación debe evaluar que no existan signos de alarma, que requieran hacer una colonoscopía para descartar la patología tumoral en el colon.

“Más allá del trastorno funcional, que es el mal funcionamiento del colon o del esfínter anal, uno tiene que descartar que exista una masa orgánica. Cuando uno detecta pacientes con cambios abruptos, con anemia, con sangrado, con pérdida de peso, y en los mayores de 50 años, se recomienda la colonoscopía para descartar la presencia del cáncer de colon” expresó.
Cueli subrayó que son casos particulares, pero que no existe una relación causal entre la constipación y el tan temido cáncer de colon.

“No todos los que tienen constipación tienen cáncer de colon, pero obviamente en ciertos casos no está mal hacer un estudio, aunque no es tan frecuente. Lo más común es que sea algo funcional” insistió.

Las recomendaciones para tratar la constipación no por repetidas dejan de ser eficaces: tomar dos o tres litros de agua por día; consumir de 25 a 30 gramos por día de fibra (todo lo que sea salvado, semillas, frutas, verduras) y hacer ejercicios aeróbicos.

“Si ni aún así se logra combatir la constipación entra a jugar la medicación. El tema es que primero hay que ir hacia el abanico del cambio de hábitos, la dieta y el ejercicio” recomendó.

En tal caso, el doctor Cueli explicó los pasos a seguir por los pacientes aferrados estrictamente a los cambios de hábitos que por un motivo u otro dejen abandonarlo por un tiempo. Por ejemplo, en caso de viaje o por una alteración temporal en su estilo de vida.

“Siempre se puede hacer un suplemento de fibras dietéticas o el psyllium ayudan. Diferentes tipos de laxantes para ablandar la materia fecal que contribuyen a evitar la constipación” dijo.

“Hay algunas pastillas nuevas para estimular la motilidad del colon, que no son laxantes en sí, sino a aquellas personas que tienen un colon un poco lento le hacen mover un poco más rápido para poder evacuar. Son los procinéticos del colon” identificó.
Citó el caso de la gente que en el trabajo o de visita en otras casas no va al baño porque acostumbra a usar sólo su baño: “Cuando pasa más tiempo, más se constipa y después le cuesta cada vez más evacuar y la constipación que después genera un tema de hemorroides, fisuras que traen como consecuencia complicaciones bastante dolorosas”.

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“La gente lo toma por su cuenta y los médicos en general no lo solemos recetar como laxantes. Tiene el riesgo en pacientes mayores que se pueden broncoaspirar y generar un cuadro de neumonitis. Tomarlo, en sí, no tiene tantas complicaciones” respondió.

Por supuesto, la instructiva charla con el doctor Cueli sobre la constipación dejó reservado un espacio para las recomendaciones finales: “Lo ideal es hacer una consulta con el médico de cabecera o el gastroenterólogo para detectar que no haya algún signo de alarma, porque hoy en día lamentablemente el cáncer de colon es muy frecuente”.

“El agua -dos a tres litros por día- para mí es la base fundamental del tratamiento, que hace que la materia fecal normalmente dura del constipado se ablande y al ablandarse favorezca la evacuación; la fibra como base fundamental de la dieta y el ejercicio aeróbico cuatro o cinco veces por semana. Antes de tomar un laxante lo ideal es agotar las medidas higiénico - dietéticas” completó.