02-06-2025

Dos casos en 24 horas para abrir los ojos

Los episodios atravesados por Franco Janson en Bolívar y Elías Romero en la cancha de Embajadores invitan a un profundo análisis a los organizadores del fútbol doméstico.

El sábado a la tarde todo el mundo estuvo en vilo en la cancha de Embajadores por el mal momento que debió atravesar el futbolista de Lilán Elías Romero y el domingo la escena se repitió con Franco Janson en Bolívar.

Elías Romero sufrió un duro golpe tras un choque con el arquero de Ferro Franco Vedelini, perdió el conocimiento, que pudo recuperar recién el Hospital Municipal “Dr. Héctor Cura” y quedó como saldo una fractura en el tabique nasal.

El domingo, Franco Janson recibió un codazo en la cabeza durante el primer tiempo del partido entre Ciudad de Bolívar y Espigas. En el segundo cayó desplomado en el campo de juego y -de acuerdo con el informe de sus familiares- habría sufrido una taquicardia.

El ex futbolista de Ferro, Racing y Municipales (entre otros) debió ser hospitalizado y bajo su responsabilidad a las pocas horas regresó a Olavarría, cuando la sugerencia de los médicos era quedarse en observación algunas horas más.

Ambos episodios invitan a una reflexión: en materia de salud no están permitidas las improvisaciones y vuelve a la mesa de debate si debe ser obligatoria o no la presencia de una ambulancia en los escenarios deportivos.