Racing - Loma Negra, 33 años más tarde

Volverán a definir un título. La última vez fue en 1992, la más recordada en la historia del fútbol olavarriense, por lo apasionante dentro de la cancha y lo triste fuera de ella.

Loma Negra - Racing, Racing - Loma Negra volverán a protagonizar este domingo una final exactamente 12.033 días después de la definición más recordada en la historia del fútbol olavarriense: por lo bueno y por lo malo.

Hace 33 años Olavarría tenía un solo representante en el viejo Regional de Clubes Campeones que organizaba el Consejo Federal y debieron disputarse esa plaza Loma Negra (campeón del Mayor de 1991) y Racing (ganador del Clasificación de 1992).

Ambos, además, habían llegado a la última fecha del Mayor de 1991 separados por apenas un punto y el empate 0-0 por la última fecha en el Parque Olavarría (por entonces estadio “Ignacio Zubiría”) dio el título a los celestes.

Eran los grandes equipos de aquel año. Loma Negra había peleado la supremacía del fútbol local con Ferro en el comienzo de la década y con el desmantelamiento de los carboneros en 1992 tomó la posta Racing.

El chaira necesitaba cortar una racha de 16 años sin títulos locales y se reforzó para conseguir ese objetivo, con Dardo Seibel como entrenador, sumó a los mejores jugadores que ofrecía el mercado doméstico y dos delanteros de lujo: Angel Ismael Flores y Guillermo Barbeito.

Peleó el “Clasificación” mano a mano con Loma Negra y lo terminó ganando por apenas 3 puntos, 27 contra 24 (época de dos unidades por partido ganado), gracias a la victoria por 1-0 ante los celestes el 21 de junio.

Ello obligó a una definición entre ambos por la plaza en el torneo Regional, con una expectativa pocas veces vista en el fútbol olavarriense. Teledifusora Olavarría, por primera vez desde su creación en 1983, emitió en diferido toda la serie con un despliegue inédito para los medios de la Ciudad de tres cámaras.

Y empezó a tono con tanta pasión y una incidencia inesperada. El primer enfrentamiento fue el 13 de julio en la cancha de Loma Negra, goles de José Ragg a los 15' y Pablo Ponce 3’ más tarde. Se completó el primer tiempo y el partido debió suspenderse como consecuencia del diluvio que se descargó sobre la Villa Alfredo Fortabat.

Reanudaron dos días más tarde, con un tiempo de 23’ y otro de 29’, sin que se produjeran alteraciones en el marcador.

El segundo partido fue el 20 de julio en el “Buglione Martinese” y Loma Negra sacó una ventaja de 3-1 que parecía definitiva a los 55’. Pero Racing, con un jugador menos por la expulsión de Pedro Torres, descontó primero a través de Eduardo Doncel a los 72’ y tres minutos después del tiempo regular empató Gustavo Guevara contra el arco que da a la avenida Sarmiento.

La expectativa no paraba de aumentar, la pasión tampoco. Ambas dirigencias, priorizando el aforo y la mayor seguridad que ofrecía el “Buglione Martinese” en cuanto a distancia entre las parcialidades (en aquellos años aún subsistían las dos tribunas tubulares sobre la calle Cerrito), acordaron jugar el tercer encuentro en la cancha de Racing.

Se vendieron casi 5 mil entradas, los cálculos oficiales hablan de cerca de 7 mil personas en el estadio.

El nudo de nervios, miedos y ansiedades que implican este tipo de partidos lo desató el recordado Héctor “Latigo” Benz con dos corridas fenomenales y en 10 minutos (55’ y 65’) sacó una ventaja de dos goles que esta vez Racing no pudo remontar.

Lo que debía coronar una fiesta del fútbol olavarriense derivó en una tragedia. Al ingresar un parte de la parcialidad de Loma Negra (que ocupaba la tubular más cercana a la avenida Sarmiento) para celebrar con sus futbolistas la barra de Racing se metió en la cancha para evitarlo.

El resto fue un espiral de locura, violencia, represión descontrolada de la policía de la provincia de Buenos Aires. El caos se trasladó al puente de la avenida Sarmiento y se cobró la vida del jovencito de 18 años Cristian González en la esquina de Sarmiento y Brown por la bala de un uniformado.

“Salieron por Sarmiento -relató un testigo para el diario El Popular-; la hinchada de Racing empezó a correr. A dos metros de donde estaba yo cayó un chico con discapacidad y le pegaron un tiro en una pierna”.

“Estaban re sacados los policías. Iban por Lavalle en contramano, de Sarmiento hacia Colón. Los barras de Racing tiraban piedras. A unos 50 metros vi el tumulto y un pibe caído en el piso” reportó el testigo.

Era Cristian González, el nombre tristemente asociado con la última final que disputaron Loma Negra y Racing.