01-12-2025
Son datos del primer estudio multicéntrico nacional que evaluó la prevalencia de la lipoproteína(a), un marcador de riesgo cardiovascular.
Un estudio multicéntrico dirigido por investigadores argentinos reveló que más de un tercio de los adultos en el país presenta niveles elevados de lipoproteína(a), un tipo de colesterol genético que aumenta el riesgo cardiovascular.
Los resultados, publicados en la revista Atherosclerosis, surgen del mayor estudio argentino realizado hasta la fecha sobre prevalencia y relevancia clínica de la Lp(a).
El trabajo, liderado por Pablo Corral, ex presidente de la Sociedad Argentina de Lípidos, involucró a 3.000 adultos en hospitales públicos y privados de seis regiones del país.
“El 31,4% de los argentinos tienen niveles elevados de Lp(a), lo que refleja la prevalencia mundial y confirma un factor de riesgo importante, a menudo pasado por alto”, señaló Corral a Infobae.
El análisis mostró que un tercio de los participantes poseía concentraciones superiores a los valores considerados elevados (>50 mg/dL o >125 nmol/L), sin diferencias entre hombres y mujeres.
“La lipoproteína pequeña A o Lp(a) es una subespecie de colesterol, que está determinada en forma genética. Es como el color de los ojos, uno nace con Lp(a) normal o elevada y es un factor de riesgo como si fuese el LDL-colesterol”, definió el especialista.
La Lp(a) se origina por una alteración genética en el metabolismo de los lípidos. Los estudios habituales de colesterol no incluyen la medición de esta lipoproteína, lo que dificulta la detección.
En niveles elevados, incrementa la probabilidad de infartos, accidentes cerebrovasculares (ACV) o estenosis en la válvula aórtica.
La presencia de valores alterados no genera síntomas y, además, no puede ser contrarrestada mediante cambios en el estilo de vida.
“No hay factores exógenos que influyan poderosamente sobre la lipoproteína. Por más que uno haga ejercicio o coma sano, o al revés, si uno fuma, si es diabético o hipertenso, no influye sobre los niveles de la lipoproteína pequeña A porque en más del 95% está determinada en forma genética”, aclaró Corral. (Con información de Infobae)