Síndrome del ojo seco, una afección que se ignora

Marcela Tacchella, oftalmóloga local, indicó que esta patología afecta entre un 25 y 35% de la población. Causa incomodidad, ojos rojos y afecta la calidad de vida de quienes la padecen.

Este sábado 13 de diciembre se celebra en todo el territorio nacional el Día del Oftalmólogo, como sucede desde el año 1952, en homenaje a todos los profesionales que se dedican día a día al tratamiento y prevención de patologías oculares de la población. La fecha se estableció en conmemoración de la festividad de Santa Lucía, patrona de la salud visual.

Marcela Tacchella, Oftalmóloga de la Ciudad, dialogó con Verte sobre el síndrome del ojo seco, que afecta entre un 25 y 35% de la población y aparece cuando las glándulas lagrimales producen poca o mala calidad de lágrimas.

Las millones de personas que padecen esta patología experimentan ardor, irritación, sensación de cuerpo extraño, ojo rojo y visión borrosa.

Acerca de los factores que predisponen a la población a tener este síndrome, Tacchella indicó que la edad es uno de ellos, principalmente a partir de los 45 años, también el sexo debido a que es más frecuente su aparición en mujeres debido a los cambios hormonales como la menopausia y los anticonceptivos orales.

También las enfermedades preexistentes como artritis reumatoidea, diabetes y las tiroideas pueden provocar la aparición del ojo seco.

En cuanto a cuestiones externas al organismo, las condiciones ambientales también pueden ser determinantes, entre ellas la exposición al humo, viento y climas secos.

Asimismo, sostuvo que actualmente un gran causante de esta afección es el uso de pantallas. “Quienes trabajan con una computadora por tiempos prolongados y no parpadean de manera regular también pueden desarrollarlo”, resaltó.

En esa línea, la profesional de la salud indicó que existen dos tipos de ojo seco:

El evaporativo, que se da por la deficiencia de la capa lipídica (capa externa u oleosa de la película lagrimal) donde se produce una disfunción de las glándulas de Meibomio ubicadas en los párpados que evita la evaporación de las lágrimas, pude ser tanto por menor o mayor cantidad de lípidos.

El secretor que ocurre por deficiencia de la capa acuosa, que produce alteraciones vinculadas a la pérdida nutritiva y de lubricantes que proporciona protección y humedad a la córnea y también elimina residuos y está producida por la glándula lagrimal.

“Cuando empieza a funcionar mal el lagrimal no se eliminan los residuos ni se lubrica el ojo, lo que produce irritación y da la sensación de tener arena o pequeñas piedras en el párpado”, explicó.

Además, sostuvo que existen casos en el que los pacientes contienen ambos tipos de ojo seco, es decir, mixto, en el que se dan las dos disfunciones en simultáneo.

Sobre el diagnóstico, Tacchella mencionó que existen varios test para evaluar si el paciente cuenta con el síndrome del ojo seco.

El test de schirmer se basa en una prueba oftalmológica simple que mide la producción de lágrimas para diagnosticarlo, colocando una tira de papel de filtro en el párpado inferior durante 5 minutos para ver cuánta humedad absorbe, indicando si hay suficiente lubricación o si falta lágrimas para mantener el ojo sano.

Otro de los más utilizados es el BUT donde se realiza una prueba para evaluar la calidad de la película lagrimal y diagnosticar el ojo seco, midiendo cuánto tarda la lágrima en romperse después de un parpadeo mediante el uso de tinte.

También existen diagnósticos mediante aparatología especial como la meibografía, la cual utiliza imágenes infrarrojas para visualizar y evaluar las glándulas de Meibomio, que producen la capa lipídica de las lágrimas.

Tratamientos

La oftalmóloga sostuvo que en la actualidad existen diversos tratamientos para esta afección y que “los pacientes están acostumbrados a usar millones de gotitas que son paliativos pero no resuelven el problema de raíz”.

Las intervenciones más comunes frente al ojo seco son: para ojos secos secretores la colocación de ‘Punctum Plug’. “Son taponcitos de silicona que se introducen en los puntos lagrimales, y en el caso de tener inflamación en los párpados se debe realizar la limpieza del mismo”.

“El IPL también es una tecnología que se usaba para enfermedades de la piel pero ahora también la utilizamos para el ojo sexo, que es luz policromática en el espectro láser de alta intensidad. Se trata de un tratamiento no invasivo que actúa entre 420 nm y 1200 nm y es utilizada para tratamiento de ojo seco, actuando en la estimulación del nervio trigémino y también es utilizado en tratamientos de enfermedades de la piel como la rosácea, el acné y cosméticos”, destacó.

Sobre consejos para saber si se tiene el síndrome de ojo seco y tratarlo, Tacchella remarcó que “siempre hay que concurrir al oftalmólogo para el diagnóstico y tratamiento y también hacer cambios en el estilo de vida como recesos en la lectura o descansos frente a las pantallas, tomar agua y evitar sustancias irritantes”.

“Es importante también su diagnóstico y tratamiento para tener una buena evolución en los postoperatorios de cirugías refractiva y de cataratas con lentes premium”, apuntó.